Cuando los pacientes desean someterse a un procedimiento estético, se invierte una cantidad increíble de planificación, preparación y tiempo. Desde la consulta inicial, pasando por la mesa de operaciones, hasta la recuperación en casa, se invierte mucho trabajo en la elección y obtención de los resultados deseados.
Pero incluso después de todo esto, a veces los pacientes se sienten deprimidos tras la operación. Los resultados son los que querían, pero experimentan una tristeza que parece surgir de la nada.
¿Qué causa la depresión después de la cirugía? ¿Qué gravedad tiene? ¿Y qué puede hacer usted como paciente de cirugía plástica para prevenirla?
Causas comunes de la depresión postoperatoria
Muchos pacientes se sorprenden al saber que cierta depresión después de la cirugía se considera normal, incluso si sus resultados son exactamente los que querían. La causa de esta depresión varía en cada paciente y depende de muchos factores. El momento, el entorno, la red de apoyo, la salud mental y las estrategias de afrontamiento pueden influir en el estado de ánimo del paciente después de una cirugía mayor.
Pero las siguientes son las razones más comunes de la depresión después de un procedimiento:
- Anestesia – Durante las primeras horas del postoperatorio, la presencia de anestesia en el sistema puede desencadenar sensibilidad emocional y ansiedad. Estos sentimientos se disiparán a medida que la anestesia sea procesada y eliminada del cuerpo.
- Medicamentos – Algunos medicamentos para el dolor se han vinculado a problemas con el estado de ánimo causando a menudo tristeza. Estos efectos desaparecerán una vez terminada la prescripción. Pero si la depresión es grave, el cirujano hablará con usted sobre otras opciones.
- Frustración – Especialmente para las personas activas, estar confinado en una parte de la casa para descansar y relajarse puede ser extremadamente frustrante. Puede que la recuperación se interponga en las tareas de la casa, los recados que hay que hacer o la lista de tareas pendientes. La frustración acumulada es una causa conocida de sentimientos de depresión e impotencia.
- Dolor y malestar – Estos dos culpables pueden hacer que cualquiera se sienta miserable. Si estás incómodo todo el día, no puedes dormir y no encuentras alivio, por supuesto que te sentirás un poco deprimido.
- El desánimo postoperatorio – Toda esa planificación puede hacer que la adrenalina se dispare. A veces, los pacientes están tan preparados y listos para su procedimiento, que la realización de que todo ha terminado puede ser un golpe. Incluso si los resultados son exactamente los deseados, puede haber una parte del paciente que tenga que bajar de ese subidón de adrenalina de la planificación. El tiempo de recuperación también puede agravar esto, lo que lleva a una revelación final que puede parecer anticlimática.
- Trastorno Dismórfico Corporal (TDC) – Especialmente si es la primera vez que se operan, algunos pacientes se someten a la cirugía plástica sin darse cuenta de que tienen una condición conocida como Trastorno Dismórfico Corporal. El TDC es un trastorno de la imagen corporal que puede hacer que una persona esté constantemente preocupada por el aspecto que quiere tener, o por un defecto percibido que tiene. En los casos no tratados de TDC, los pacientes pueden recurrir a la cirugía plástica una y otra vez para conseguir los resultados adecuados, lo que en realidad es imposible hasta que se enfrenten a sus problemas de imagen
Cómo entender la depresión postoperatoria
Conociendo las razones que pueden causar la depresión después de la cirugía, es fácil ver por qué esto puede ser un problema tan fácil de tener. Cualquier forma de depresión debe ser tratada con cuidado y precaución para asegurarse de que la curación adecuada, tanto física como mental, puede ocurrir después de la cirugía. Aunque muchos pacientes sólo experimentan sus depresiones postoperatorias como una condición leve, pueden darse casos graves.
Si se siente mal después de la intervención, no intente manejarlo por su cuenta. Hable con su familia y amigos para pedirles apoyo mientras se recupera y no dude en hablar con su cirujano plástico.
La depresión nunca debe ser tratada a la ligera, ignorada o minimizada. Trate sus estados de ánimo después de la cirugía con la misma precaución con la que trataría sus síntomas físicos. Esa es la mejor manera de asegurarse de que se recuperará por completo.
Cómo protegerse de la depresión después de la cirugía
La mejor manera de protegerse de la depresión después de su procedimiento es hablar abiertamente sobre el tema con su cirujano plástico. Ellos tienen experiencia con muchos pacientes diferentes y pueden hablar de los problemas que han enfrentado después de la cirugía.
Visualice los resultados que quiere conseguir con la cirugía plástica y planifique su periodo de recuperación con entusiasmo. Si mantiene una actitud positiva, se preparará para tener buenas sensaciones durante su recuperación.
Además de ser realista sobre los resultados que el procedimiento puede lograr, el paciente debe darse el tiempo que necesita para procesar cualquier tristeza o mal humor que pueda ocurrir. Al reconocer la validez de estos sentimientos como un simple efecto secundario de la cirugía, afrontarlos y gestionarlos será mucho más fácil.
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